La
Democracia…ha
muerto
Escribe Adrian Salbuchi
Una media verdad suele ser mucho más peligrosa que una mentira
flagrante por cuanto, como bien dice la sabiduría popular, las mentiras suelen
tener "patas cortas", mientras que las medias verdades se revisten de solemnidad
y aparentan indignación cuando se las quiere desenmascarar, lo que las torna más
convincentes. A su vez, las medias verdades facilitan y promueven los dobles
discursos, que no solo declaran una cosa y luego hacen otra, sino que miden las
cosas con gran subjetividad y a su
conveniencia.
Desde hace ya muchas décadas las dirigencias políticas,
mediáticas y académicas del primer mundo industrializado vienen proclamando la
imperiosa necesidad de que todas las naciones adopten "la democracia" cómo único
régimen aceptable. Similar fenómeno se observa en el último cuarto de siglo en
la
Argentina.
Sin embargo, "la
democracia" hace tiempo que dejó de ser una propuesta doctrinaria,
intelectualmente consistente, puesto que hoy se ha transformado en un dogma de
fe, en el cuál debe creerse y que debe adoptarse universalmente, so pena de ser
aniquilado por los rayos del olimpo democrático...
Los dogmas de fe no se discuten, se los aceptan
ciegamente. Así, a través de un
complejo conjunto perverso de medias verdades y dobles discursos,
la
Democracia – genuina
doctrina que consolida la libertad para los pueblos – hoy ha quedado degradada
mutándose de doctrina en dogma; o sea, en una parodia que se parece tanto a la
verdadera Democracia como la foto de un plato de comida puede parecerse al
alimento verdadero. En la penumbra
y confusión, a primera vista esa foto quizás logre engañar nuestra vista, pero
al tratar de nutrirnos con ella, la cruel y venenosa realidad se hará patente.
En este artículo se abordan algunos aspectos fundamentales que
muestran que, el mundo en general y nuestro país en particular, hace largo
tiempo que dejaron de vivir en Democracia, por más que el esqueleto de la misma
aún rija en lo meramente formal. Precisamente, es esa formalidad lo que le da
carácter de media verdad a la "democracia" actual, permite que rija una
auténtica dictadura en manos de minorías – a menudo violentas y perversas – que
se mantienen en el poder por la fuerza y a través de la hábil aplicación de
dobles discursos, medias verdades, hipocresías y crueles y alevosas mentiras.
DEMOCRACIA
versus "democracia"
Comencemos distinguiendo entre:
Democracia – doctrina viva y dinámica que permite la justa, equilibrada y
funcional distribución del poder sobre la Res-pública entre el pueblo – y lo que denominamos "democracia",
que no es más que el cadáver de aquella cuando se la mata. Esta "democracia" degradada y pútrida
deviene entonces en vampírico instrumento de control y dominio al servicio de
intereses parasitarios que sistemáticamente operan en contra de los intereses
populares. ([1]) Por eso, hoy decimos con tristeza:
la
Democracia ha
Muerto. Tomar conciencia de ello resulta
fundamental pues el cadáver fétido de la "democracia" está tornando insoportable
la vida en comunidad no solo en la
Argentina y nuestra
región, sino también en el mundo entero.
Si el aire se vuelve cada día más irrespirable es porque al puro oxígeno
de la Democracia lo están reemplazando con los vapores venenosos y
sulfúricos de la "democracia".
La sanación de toda enfermedad
comienza con un diagnóstico que
identifique correctamente el mal que aqueja al cuerpo afectado – cuerpo social
en nuestro caso – y las causas del mismo.
Recién entonces puede definirse una adecuada terapéutica que – bien aplicada, en
tiempo y forma – conducirá a la salud.
Pretendemos aportar ejes para lograr ese imprescindible diagnóstico,
definiendo los males que nos aquejan y sus causas que conducirán a una adecuada
terapéutica. Por ello,
distinguimos entre la verdadera Democracia que, basada sobre
la
Verdad y
la
Justicia, promueve el Bien
Común de la Comunidad, por un lado; y la cadavérica "democracia", que
funciona como instrumento de dominio de minorías poderosas en contra del Bien
Común, por el otro lado: con mayúscula la primera, y en minúsculas y entre
comillas la segunda, pues se trata de dos conceptos antagónicos e
irreconciliables, por más que a la "democracia" se la quiera imponer como
verdadera. Ello surte el mismo
efecto que sustituir al verdadero alimento por una linda foto del mismo… Ordenemos, entonces y en primer lugar,
algunos conceptos en el siguiente cuadro comparativo:
…Algunos
son mucho mas iguales que
otros…
En "Rebelión en
la
Granja", George Orwell pone en boca de uno de los
cerdos políticos la famosa frase de que "todos los animales en la granja son iguales,
pero algunos son más iguales que otros". Es esta una de las particularidades de
la "democracia" cadavérica que hoy padecemos. Nos ofrece la media verdad de que
legalmente todos tenemos el mismo derecho – o sea, "un hombre = un voto" – mas
todos sabemos que ello no es legítimo por cuanto aquellas personas que tienen
mucho poder disponen de la capacidad para modificar el orden social, torcer el
rumbo de la cosa pública, comprar votos, candidatos, medios de comunicación,
incluso, invadir países (para llevarles la "democracia", por supuesto).
Por eso, primero comprendamos
que lo que importa no es tanto disfrutar del derecho legal de votar cada tantos
años, sino del derecho real a hacer valer el interés de la mayor parte de
la
Comunidad, y esto último se encuentra
íntimamente ligado a la cantidad de Poder que los individuos, los grupos y
las propias naciones tienen para hacer valer esos derechos e intereses. Mientras que la verdadera Democracia
sirve al Bien Común, la "democracia" cadavérica sirve a quienes detentan el
Poder. Comprendamos entonces que
este violento Nuevo Orden Mundial en el que estamos inmersos se rige por el
Poder, el cual tiene sus reglas, algunas de las cuales esbozamos como
sigue:
Las Reglas del Poder
([2]
)
Regla No.
1 – El
mundo actual no se rige por la
Justicia,
ni por la búsqueda del Bien Común, ni por los tratados internacionales, ni por
la Ética, ni – mucho menos – por
la
Democracia. El mundo se rige por el
Poder.
Regla No.
2 – La
cantidad de Poder del que
disponen individuos, organizaciones y naciones es un factor clave y
determinante. Sin embargo, la
calidad de Poder – dado por la
creatividad, capacidad e idoneidad de quienes lo detentan – conforma un factor
aún más
importante.
Regla No.
3 – La
Ley
del Poder
es una ley de hierro; cruel y fría: Quien tiene Poder lo utiliza para promover
sus objetivos e intereses. Quien no tiene Poder sufre las consecuencias de las
acciones de quienes tienen Poder para promover sus objetivos e intereses.
Regla No.
4 – El
Poder Real impulsa causas usualmente no-visibles que
generan efectos altamente visibles puestos en práctica por el Poder Formal. Simétricamente, el Poder Formal – que es el que
mayormente detentan los gobernantes "democráticos" – manifiesta efectos visibles que obedecen a causas
usualmente no visibles emanadas desde las instancias del Poder Real.
Regla No.
5 – La
gran privatización de nuestros tiempos es la
Privatización del Poder a
escala planetaria y a escala nacional.
Consecuentemente,
Regla No.
6 – Hoy
tenemos un Gobierno Mundial, pero dado que el Poder Mundial ha quedado
privatizado, surge como corolario que el Gobierno Mundial que rige el planeta también es
de naturaleza eminentemente privada.
El Poder
del Dinero
Hoy, - ¿quién lo duda? - el principal factor de poder planetario
es el dinero. Cuánto más dinero se
posea y se controle, más fácil resultará imponer los intereses y objetivos de
quienes lo detentan; más poder se tendrá; más poder se concentrará. Es una
maquinaria que se retroalimenta exponencialmente. Pues, ahí está el quid de la cuestión:
concentrar dinero implica concentrar poder y viceversa. Uno es consecuencia directa del otro. Se
trata, simplemente, del Poder del Gran
Dinero.
El Nuevo Orden Mundial
claramente se rige por el Poder del Dinero. ¿Y cuál es el mayor enemigo del Poder
del Dinero, concentrador, violento y rapaz? Pues…
¡la verdadera Democracia! …con mayúsculas, se entiende. La
Democracia viva y auténtica que –
poderosa y sólida – garantiza que prevalezca el Bien Común de
la
Comunidad y el Interés Nacional ante,
precisamente, el Poder rapaz y violento del Gran Dinero y las minorías ínfimas
que lo controlan.
Desde esta óptica, al menos
la
Lucha de los pueblos queda
nítidamente planteada: o se tiene una verdadera y legítima Democracia que
prioriza el Bien Común, o se impone la "democracia" cadavérica – legal, mas no
legítima – controlada por el Poder del Gran Dinero. Se trata de una guerra sin cuartel entre
el Oro de la usura o
la Sangre de los
Pueblos. Ambos bandos son absoluta
e irreconciliablemente antagónicos y enemigos.
A su vez, visto desde la óptica de los Pueblos, su Gran Enemigo lo
conforma la minoría usurpadora y genocida del Poder del Gran Dinero. Simétricamente, visto desde la óptica de
los grupos pequeños que concentran ese Gran Dinero, su Gran Enemigo lo conforma
la mayoría de los Pueblos; o sea, usted y yo. ([3]
) Oro o
Sangre…
La Anti-democracia
del Poder del gran
Dinero
Siempre me ha sorprendido el
hecho de que las dirigencias políticas, los multimedios monopólicos, los
intelectuales, académicos y opinólogos de turno suelen llenarse la boca hablando
de la "democracia" aplicada a la política y a la cultura (que hoy es la causante
principal del generalizado debilitamiento de los Estados nacionales y la
decadencia atroz de la cultura), pero jamás abordan la imperiosa necesidad de democratizar las finanzas y la
economía. Pareciera que fuera
un tema tabú, y aunque la realidad a la vista de todos es que economía y
finanzas se rigen por un férreo autoritarismo ferozmente antidemocrático,
ninguno de quienes debieran señalar este hecho tan obvio parece atreverse a
hacerlo. "Poderoso Caballero es don Dinero", ya
lo observaba hace casi cuatrocientos años el poeta español Don Francisco de Quevedo y Villegas
([4]). Y muy aleccionador resulta ver por
dónde anda transitando el poderoso caballero Don Dinero en este terrible siglo
XXI…
Según nos enteramos por la prestigiosa revista estadounidense, "Forbes
" ([5]) – publicación perteneciente a la
multimillonaria familia homónima
dedicada, precisamente, al fabuloso mundo de los inmensamente ricos – existen
hoy en el mundo 793 "billonarios" ([6]
), que en su conjunto son dueños de una riqueza total de u$s
2.600.000.000.000 (o sea, dos billones seiscientos mil millones de
dólares). Para tener una mejor
idea, ese monto en manos de 793 individuos equivale al 25% del PBI de los
Estados Unidos, o aproximadamente al 12% del PBI del planeta, o a veinte veces
el PBI de la República Argentina.
Esta concentración demencial de poder viene en aumento a lo largo
de los últimos años, y tan solo en el último año el número de billonarios
aumentó en 102 y su riqueza conjunta aumentó 18%; ¡¡en un solo año!!
Según informa "Forbes",
buena parte de ese aumento es debido al crecimiento de los índices bursátiles
que hace que los ricos sean cada vez más ricos, y a las clases medias y pobres
sean cada vez más mediocres y pobres.
Como "para muestra basta un botón", destacamos el hecho de que una de las
empresas que contribuyó a generar estas gigantescas ganancias ha sido la gigante
petrolera ExxonMobil perteneciente a
la familia Rockefeller que en el año
2005 registró la mayor utilidad que cualquier empresa en la historia de los
Estados Unidos: u$s 36.400.000.000 (36 mil millones de dólares)…¡¡en
utilidades!! ¿Y de dónde vino todo
ese dinero? Del aumento vertiginoso
del precio del petróleo, lo que aumentó el precio de la nafta, los fletes, los
productos, etc… para todos. O sea,
salió de los bolsillos de millones y millones de personas en todo el
planeta. Y la situación de las
demás empresas que conforman el cartel del petróleo – Chevron, BP Amoco, Repsol-YPF, Total, Yukos,
Texaco, Shell - es similar.
Como se verá, la "crisis del
petróleo" no es tan mala después de
todo… siempre y cuando uno sea gran accionista de la ExxonMobil y ese dinero se lo
invierta, por ejemplo en el banco de los Rockefeller, JP MorganChase o en el de los
narcotraficantes, CitiGroup, que lo
reciclan por la economía global cobrando intereses usurarios y financiando todo
tipo de proyectos, pues… todos sabemos que el dinero engendra más dinero, que a
su vez, engendra más dinero… en una espiral creciente que sólo beneficia
a…¡¡quienes tienen mucho dinero, por supuesto!! Nada de esto es casual, puesto que se
trata de un Sistema global armado y
sostenido precisamente con ese fin.
Pues para que las pequeñas minorías que tienen mucho Dinero y Poder lo puedan conservar
y acrecentar, deben, entre otras cosas, defenderse de las inmensas mayorías que no
lo tienen. Para ello, nada
mejor que mantener a esas mayorías muy ocupadas trabajando y trabajando;
preocupadas por perder el trabajo; y ansiosas por lograr el nivel de vida que
las hará "felices" según el modelo que imponen a través de los medios quienes
hoy tienen el Poder. Se trata de
una auténtica e inmensamente compleja maquinaria de guerra – psicológica,
económica, política y, llegado el caso, militar – conducida por una pequeña pero
poderosa minoría en contra de la
enorme pero confundida y debilitada mayoría de las personas. Así son las cosas en Estados Unidos y en
Rusia; en Alemania y en Argentina; en Egipto y en España; en Brasil y en
Botswana…
También en
la
Argentina se verifica esta tendencia
concentradora de riqueza aunque a un nivel infinitamente menor, por cuando
actualmente, el 10% más rico de la población obtiene 31 veces más ingresos que
el 10% más pobre, mientras que en el 2004, esa brecha era de 28 veces y en 1994,
de 18 veces. En todas partes, los
ricos lo son cada vez más y los pobres lo son cada vez más; claramente, no es
casualidad sino el resultado de un Sistema con objetivos verificables ([7]
). Si se proyecta esta tendencia en el
tiempo, se podrá comprobar que este sistema es fundamentalmente suicida pues en
algún momento, el quiebre social y económico será muy
grave.
"Forbes" también nos ilustra sobre el
hecho de que, por 12avo año, el hombre más rico del mundo es el estadounidense
Bill Gates, fundador del gigante Microsoft, con una riqueza personal de
50.000 millones de dólares; le sigue en el ranking su connacional el especulador William Buffet con 42.000 millones de
dólares, y luego siguen personalidades como el Principe Alwaleed Bin Talal Alsaúd de
Arabia Saudita (eternos socios de los Bush, Cheney y Rumsfeld) con 20.000
millones, varios miembros de la familia Walton (dueños de la cadena minorista Wal-Mart) con una riqueza conjunta de
más de 60.000 millones (¿serán realmente tan buenos los precios de Wal-Mart?);
el premier italiano Silvio Berlusconi
(11.000 millones de dólares), el dueño de multimedios y alcalde neoyorquino Michael Bloomberg (5.100 millones), el
venezolano Gustavo Cisneros (otro
dueño de multimedios del Establishment con 5.000 millones), el
magnate de los diamantes sudafricano Nicky Oppenheimer (4.600 millones), el
francés Gerard Louis Dreyfus (3.400
millones), el brasileño - hay unos cuantos - Jorge Paulo Lemann (3.400 millones), la
"española" Esther Koplowitz (3.400
millones), el ex-presidente de AIG/American Internacional Group - la
mayor aseguradora norteamericana - Maurice Greenberg (3.200 millones;
Greenberg ha sido procesado por fraude junto a sus hijos en un escándalo
ocurrido en 2004 en el sector asegurador), Edgar Bronfman Jr. (3.000 millones de
dólares; dueño de las destilerías Seagram y presidente del Congreso Mundial
Judío), el cineasta Steven Spielberg
(famoso por su Lista de Schindler con
2.800 millones), David Rockefeller
(cabeza de la dinastía homónima, dueña de ExxonMobil, JP MorganChase Bank,
presidente vitalicio de la Trilateral
Commission, el Council on Foreign Relations y
la Americas
Society), los hermanos Gilberto, Luciano y Carlo Benetton
(italianos, con unos 7.500 millones que han comprado gigantescas extensiones de
"nuestra" Patagonia), el israelí Steff
Wertheimer (2.400 millones), Mortimer
Zuckerman (dueño de la revista US
News & World Report con 2.000 millones), el especulador
húngaro-norteamericano George Soros
(con 7.200 millones), el estadounidense Ronald Perelman (6.100 millones)…. Argentinos, hay uno solo: Gregorio Pérez Companc con apenas 1.700
millones de dólares, lo que lo dejó relegado al puesto No. 451...
Coherentemente, los intereses
de estas personalidades inmensamente ricas suele coordinarse a través de centros
de planeamiento geopolíticos – los conocidos "think tanks" o bancos de cerebros – de
los que son miembros ellos mismos y/o sus operadores, gerentes y testaferros:
notablemente el Grupo Bilderberg,
la Trilateral
Commission; el Council on Foreign Relations; el Royal Institute of Internacional Affairs
y otras organizaciones complementarias que conforman una nutrida red de
planeamiento estratégico y operativo que promueve e impone los intereses y
objetivos del Nuevo Orden Mundial del que son sus auténticos dueños. Esto lo hemos descrito en gran detalle
en el libro "El cerebro del Mundo: la cara oculta de la
Globalización". ([8]
)
Cuando 793 individuos son dueños de, y controlan un monto del
orden de los u$s 2.600.000.000.000, que usan para promover sus intereses
industriales, financieros, económicos, políticos y culturales, financiando
medios de difusión, universidades, periodistas, investigadores, ONG's,
operadores, gerentes, presidentes, ministros, legisladores, jueces, gobernadores
e intendentes – todo a menudo disfrazado de "filantropía" y "caridad" - ¿de
qué "democracia" estamos hablando para nuestro afligido planeta? Comprendemos entonces que la verdadera y
legítima Democracia ha muerto, asesinada por el Poder del Dinero, y que en su
lugar nos ha sido impuesta la cadavérica "democracia" que hoy sufrimos. Nos recuerda un poco a esas grotescas
películas de Hollywood en las que los "muertos vivos" arrastran sus carnes
podridas en la noche, exhalando su contagio sobre la tierra... o los filmes del
Conde Drácula, quien vive en la oscuridad parasitando a la vida… Quizás estás
últimas encierren en su metáfora, una gran y terrible verdad.
Este es el mundo que tenemos. Esta es la "democracia" que
tenemos. Esta es la tragedia de la
humanidad.
De poco sirve enojarse con los
gobernantes/gerenciadores de turno: George W. Bush o Clinton; Tony Blair o
Margaret Thatcher; Néstor Kirchner, Menem o Videla; Aznar o Rodríguez Zapatero;
Collor de Melho o "Lula"… Todos ellos más quienes ganen futuras elecciones
"democráticas" son, básicamente, descartables. Si a los poderosos les falla un De
la
Rúa, nos meten un Duhalde; si un
Duhalde no logra consolidarse, nos tiran con un Kirchner…
Una de las organizaciones declaradas, que pretende manejar los destinos del mundo es el Grupo Trilateral:http://www4.dr-rath- http://www4.dr-rath- |
sábado, 16 de junio de 2012
La Democracia…ha muerto
email enviado el 19/03/06
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario